Todo se generó cuando el ejemplar purasangre era el segundo favorito de la competencia (Bs. F. 5,60) y arribó exactamente a 28 1/2 cuerpos del ganador El Gran Carlos.
Luego de la actuación, el jinete profesional Edward Fuenmayor informó a la junta de comisarios que el caballo Vuelve Cruz “retrasó en la partida y realizó varios cambios de manos”.
Acto seguido, los jueces apelaron al artículo 48 del Reglamento Nacional de Carreras donde se lee que “el juez de partida informará a los comisarios después de cada carrera sobre las incidencias relacionadas con la partida, y expondrá las causas que pudieran haber originado que un ejemplar partiese retrasado o quedarse dentro del aparato de partida”.
Indicaron en la nota publicada en las resoluciones que abren la investigación “en virtud de la conducción
irregular aunada a los sucesos evidenciados durante la participación de Vuelve Cruz”.
De paso, revelaron en el informe que se evidencia la “presunta infracción del artículo 251 del reglamento donde se expresa que “los jinetes están obligados a conducir sus ejemplares en forma tal que demuestre su empeño en ganar”. Esperan la presencia de Fuenmayor y el entrenador Giovanni Zappacosta.
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